Transtornos de la infancia

En YUME trabajamos la mayoría de los trastornos: Problemas de comportamiento, ansiedad, timidez, miedos y fobias infantiles, depresión, problemas escolares y sociales, déficit de atención y hiperactividad, dificultades de adaptación, (separación o divorcio y duelos). Tambien trabajamos muy bien con niños de educación especial como síndromes de down, asperger, etc.

La musicoterapia, actúa como regulador emocional en todas estas situaciones, ya que permite a los niños exteriorizar y comunicar ideas, sentimientos y emociones que son difíciles de expresar de otra manera.

La música empleada con las técnicas adecuadas y dirigida por un profesional especializado como es el musicoterapeuta, ayuda a abrir las puertas de la expresión y muestra a los niños el camino que  puede ayudarles a combatir los problemas, respirar adecuadamente mediante diferentes técnicas de relajación, concentrarse y por supuesto, porque no, divertirse.

La música empleada con las técnicas adecuadas y dirigida por un profesional especializado como es el musicoterapeuta, ayuda a abrir las puertas de la expresión y muestra a los niños el camino que  puede ayudarles a combatir los problemas, respirar adecuadamente mediante diferentes técnicas de relajación, concentrarse y por supuesto, porque no, divertirse.

Esperamos contribuir a que las sesiones de musicoterapia, lleguen a ser el refugio donde el niño encuentre la calma que lo ayude a contener los miedos y las ansiedades de su mundo interno, y sea el niño abierto, creativo, lúdico y confiado que debe llegar a  ser.

Areas de trabajo donde es muy util:

Habilidades Motrices: A través de las actividades musicales se trabaja la coordinación y el equilibrio, la movilidad y el desarrollo de las actividades motrices funcionales. A la vez, se puede lograr la mejora de la coordinación motora, la amplitud de movimiento, el tono muscular y la respiración.

Habilidades Sensoriales: Mediante técnicas musicales dirigidas se aumenta la capacidad de recibir y diferenciar estímulos sensoriales.

Habilidades Cognitivas: Con la música como elemento motivador se estimulan las funciones superiores: la atención, la memoria, el nivel de alerta, la orientación, el reconocimiento, el aprendizaje y la imaginación.

Habilidades Socio-Emocionales: Las técnicas musicales receptivas y activas facilitan la expresión y el compartir de emociones y sentimientos a la vez que promueven la interacción y las habilidades sociales. Por otro lado, el uso terapéutico de la música fomenta el auto-conocimiento de la persona, permitiendo un aumento de su autoestima y una reducción de los sentimientos depresivos, de ansiedad y de estrés.