Receta de Febrero: “TRUFAS ALANDALUS”

Receta de Febrero: “TRUFAS ALANDALUS”

INGREDIENTES:
• 15 dátiles de los grandes
• 250 grs. de almendra molida
• 1 c/p de canela
• 1 c/p de cardamomo molido
• 1 c/p de nuez moscada
• Sirope de agave (depende de lo dulce que os guste, los dátiles ya contienen azucares naturales).
• El zumo de dos mandarinas
• Unas gotas de agua de azahar
• Aceite de coco ½ taza (lo tenéis que calentar al baño María hasta que se derrita). Es una grasa que a menos de 24º se solidifica.
• Sal y pimienta
• Semillas de sésamo
• Pistachos

ELABORACIÓN:
1. Pon todos los ingredientes juntos en la thermomix o en una buena batidora, también se puede hacer a mano, lo cual es muy terapéutico.
2. Mézclalos bien hasta que te quede una masa densa pero fácil de manejar.
3. Forma bolitas uniformes. Como ya tienen consistencia gracias al aceite de coco, no hace falta dejarlas enfriar, puedes directamente rebozarlas en las semillas de sésamo/pistacho. Después introdúcelas en la nevera y deja que cojan más consistencia. Aguantan perfectamente hasta 1 semana. Depende del tamaño os saldrán de 15/20 trufas.

SUGERENCIAS:

Combina muy bien con un oporto o vino dulce de buena calidad, también están muy ricas con un té verde, moruno o de canela.
También las hemos probado hacer con tortitas de arroz/maíz molidas en vez de la almendra molida, y quedan muy bien. La consistencia es menos contundente.

BENEFICIOS PARA TU SALUD:

Los dátiles son ricos en hidratos de carbono y azucares, pero a diferencia de los azucares blancos refinados, éstos son naturales y son liberados poco a poco, por lo cual nos ofrecen la ventaja de saciarnos durante más tiempo. También son muy ricos en vitamina B5. Vitamina muy a tener en cuenta cuando realizamos un ejercicio físico muy elevado. También ayuda a combatir el estrés, relajar el sistema nervioso y conciliar el sueño. Son un recurso ideal para aplacar los deseos ansiosos de dulce, ya que como hemos mencionado antes, nos sacian, nos nutren y nos dan energía.
La semillas de sésamo, sus virtudes no me caben en un folio, así que procurare resumiros lo más relevante.
Poseen una elevada cantidad de proteínas y son muy ricas en metionina (aminoácido esencial). Las grasas que contienen son las insaturadas que junto a la lecitina que también poseen, contribuyen a reducir los niveles de colesterol sanguíneo.
También son una fuente importante de diferentes minerales como el calcio, que interviene en la formación de huesos y dientes; el zinc, mineral que participa en el metabolismo de los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas; y el hierro. Por último, las semillas de sésamo poseen buenas cantidades de fibra, por lo que su consumo resulta beneficioso para la regulación de la función intestinal.
El aceite de coco
Hace muchos años, cuando todavía no existía la tecnología suficiente para poder distinguir entre las grasas saturadas dañinas (como la grasa de cerdo) y las grasas insaturadas beneficiosas, como el aceite de oliva, se publicó muchísima información sobre otra clase de aceites, entre ellos el de coco, que era incorrecta y no tenía una base científica.
Hoy en día se sabe que el aceite de coco extra virgen ,(no el aceite de coco hidrogenado que se ha alterado), mejora la salud, es muy rico en ácido láurico, uno de los componentes de la leche materna que está comprobado en estudios científicos que contiene propiedades antivíricas y bacterianas. Esto es lo que protege a los bebés de infecciones durante los primeros meses mientras el sistema inmunológico se desarrolla.
Para no extenderme más sobre todos sus beneficios, os pongo un enlace sobre todas sus propiedades: http://www.aceitedecoco.org/2012/08/su-cuerpo-necesita-grasas-saturadas/, para que los que lo deseéis investiguéis más sobre el tema. Yo me declaro fan absoluta del aceite de coco.